Además de ser una de las formas más creativas de tocar el bajo, el walking bass requiere un punteo firme y excelentes conocimientos teóricos. Las notas de la melodía del bajo se tocan secuencialmente con la misma y corta duración. Por lo tanto, la buena posición de la mano y los dedos es esencial.

Además, este estilo de línea se construye sobre tríadas, tétradas y escalas. Por eso, es necesario tener las escalas en la punta de los dedos y entender bien la formación de acordes y el campo armónico.

Si tienes ganas de aprender a tocar el bajo, tarde o temprano, necesitarás saber tocar el walking bass. En otras palabras, si deseas mejorar en el instrumento, este es un buen momento para aventurarte en este universo.

Entonces, ¿vamos a aprender todo sobre el walking bass?

¿Qué es el walking bass?

Uno de los fundamentos principales que un bajista necesita desarrollar es el bajo pedal. Es decir, mantener la sincronización del ritmo del bombo de la batería con la llevada de la línea de bajo.

Claro que esto varía mucho según el estilo. Pero uno de los pilares de una canción es que su sección rítmica sea cohesiva, ya que esta sincronía proporciona fuerza al ritmo de la música.

El walking bass rompe con este principio, ya que la línea de bajo se libera de lo que está tocando el bombo. Así, el bajo tiene su propio ritmo dentro de la canción. Además, la melodía del bajo puede incluso estar en un ritmo diferente al de los otros instrumentos.

¿Pero cómo funciona esto? La palabra walking es una conjugación del verbo to walk, que significa caminar. Por lo tanto, podemos traducir walking bass como “bajo caminante”.

La sensación que transmite la línea de bajo es que está caminando. Esto sucede porque la característica del walking bass es tocar las notas una tras otra y siempre con la misma duración.

¿Cómo hacer un walking bass?

Cuando creas o compones una línea de bajo usando fórmulas para el walking bass, es importante tener en mente que este caminar tiene un propósito.

Es decir, el walking bass camina de un acorde a otro. En otras palabras, el bajo está conectando un acorde, tocado por la guitarra eléctrica o acústica, el piano o el órgano, con el siguiente acorde.

Por lo tanto, al tocar una línea de bajo con un walking bass, es importante mantener la altura del sonido. Por ejemplo, puedes tocar una escala en la región del Do en la tercera casa (tercera cuerda) y cambiar a la octava casa en la cuarta cuerda.

Sin embargo, un punto importante es nunca cambiar bruscamente la altura de las notas en el walking bass. Por ejemplo, no saltes repentinamente de la tercera casa a la decimoquinta.

Las fórmulas para el walking bass pueden tocar la tónica del acorde con los otros instrumentos tan pronto como aparece ese acorde en la canción. Por otro lado, el bajista puede ejecutar alguna inversión en ese momento. Entre el acorde tocado y el siguiente, se pueden usar arpegios, escalas y aproximaciones cromáticas.

Ahora, veamos algunos ejercicios que te ayudarán a tocar un walking bass fluido:

1. Ejercicios con arpegios

Toca las tétradas de los acordes mayores y menores en forma de arpegio. Por ejemplo, veamos la tétrada del acorde A7. Toca la tónica (La) en la quinta casa (cuarta cuerda) con el dedo meñique. Luego, toca la tercera (Do sostenido) en la cuarta casa (tercera cuerda) con el anular.

A continuación, toca la quinta (Mi) en la segunda casa (segunda cuerda) con el índice. Finalmente, toca la séptima (Sol) en la quinta casa (segunda cuerda) con el meñique.

Elige un tempo cómodo para ti en el metrónomo en compases 4/4 para hacer este ejercicio y toca una nota por tiempo.

Después de que puedas tocar con facilidad todas las tétradas mayores y menores, aplica este ejercicio en diferentes progresiones de acordes. Por ejemplo, en la secuencia G7 – D7 – C7.

Comienza usando la tónica para indicar el cambio de acorde. Luego, usa las inversiones en ese momento. Es decir, cuando cambies de G7 a D7, por ejemplo, comienza el D7 desde su tercera. Luego desde su quinta y, finalmente, desde la séptima.

Empieza tocando una nota en el primer tiempo y otra en el tercer tiempo del compás. Después de que te sientas cómodo con esta dinámica, toca una nota en cada tiempo del compás.

2. Ejercicios con escalas

También con el metrónomo, toca todas las escalas mayores y menores en diferentes regiones del brazo del contrabajo hasta que las hayas memorizado bien.

Luego, aplica el mismo razonamiento del ejercicio anterior. Es decir, toma la misma progresión de acordes (G7 – D7 – C7) y toca notas de la escala de Sol mayor durante ese acorde (una nota en el primer tiempo del compás, otra en el tercer tiempo). Cuando cambies a D7, toca la nota Re.

Después de dominar este ejercicio, utiliza las inversiones y toca una nota por tiempo. Aquí puedes usar aproximaciones cromáticas. En otras palabras, toca notas fuera de la escala para conectar los acordes.

Por ejemplo, al cambiar de D7 a C7, puedes tocar la nota Re en el tercer tiempo del compás, ubicada en la quinta casa (tercera cuerda). En el cuarto tiempo, tocas el Do sostenido en la cuarta casa.

Finalmente, en el primer tiempo del compás, cuando entra el C7, tocas el Do en la tercera casa.

Walking bass en el piano

Aunque el walking bass se utiliza mucho en el bajo, tuvo su origen en el jazz con la tuba. Además, es muy común tener walking bass en el piano. De esta manera, el pianista realiza el “bajo caminante” con su mano izquierda, utilizando tétradas, arpegios, escalas y aproximaciones cromáticas.

Por otro lado, la mano derecha puede tocar una melodía o realizar los acordes, dependiendo del arreglo de la canción.

La canción Don’t Blame Me de Thelonius Monk es un ejemplo de walking bass en el piano. ¡Escúchala!

Walking bass para principiantes

Aunque es un tipo de arreglo característico del jazz y del blues, el walking bass también aparece en grandes clásicos del rock. Ahora, vamos a aprender cómo tocar 5 líneas de bajo con fórmulas para el walking bass:

1. Crazy Little Thing Called Love – Queen

Uno de los mayores clásicos de Queen, Crazy Little Thing Called Love, es uno de varios ejemplos de walking bass en el rock. La canción está en Re mayor, y John Deacon utiliza fingerpicking de tríadas, tétradas y aproximaciones cromáticas. Observa también con mucha atención el puente, donde realiza un fingerpicking descendente, y no te pierdas nuestra videoclase:

2. Time Bomb – Rancid

Incluso en el punk encontramos el uso del walking bass. Time Bomb, de los californianos de Rancid, es una prueba de ello. El walking bass de esta canción se mueve sin miedo por la escala de Si menor. Como es una canción considerablemente rápida, comienza practicando a un tempo más lento, preferiblemente con la ayuda de un metrónomo.

3. All My Loving – The Beatles

En All My Loving, el walking bass se destaca no solo del ritmo del bombo, sino también de las rápidas tercias de la guitarra base. Utilizando la escala de Fa sostenido menor, esta línea de bajo explora bien el fingerpicking descendente, aunque también se desplaza por el fingerpicking ascendente con menos frecuencia. Para aprender en detalle, no te pierdas nuestra videoclase:

4. Take The A Train – Duke Ellington

Uno de los mayores clásicos del jazz, Take The A Train de Duke Ellington, presenta un walking bass que no tiene grandes secretos. Su tempo no es rápido y recorre la escala de Do mayor, la escala más fácil de memorizar al no tener accidentes.

5. Solar – Miles Davis

Solar, de Miles Davis, presenta un walking bass rápido. Por lo tanto, practica a un tempo más lento hasta que domines la línea de la canción. Esta canción es un buen complemento para el estudio, al igual que Take The A Train, ya que Solar está en la tonalidad de Do menor.

¡Ahora sabes todo lo que necesitas para tocar walking bass! Sin embargo, siempre es posible aprender más. En este sentido, la mejor manera de mejorar en las cuatro cuerdas es con la ayuda de herramientas calificadas y enfocadas en tu desarrollo musical. 

Hoy en día existen muy buenas herramientas digitales, como las aplicaciones de Cifra Club. ¡Conócelas ahora, descárgalas y aprovéchalas!