Leyenda de un jinete que galopa sin cesar, cumpliendo la condena de cruzar la eternidad, por traicionar en vida lo que fue su gran amor, sembrando llantos y dolor, en otro corazón. Yipiaié, (yipiaié), yipiaió, (yipiaió). Jinetes por el cielo van y no se detendrán. Detrás de aquel jinete van diablos en tropel, que gritan y castigan sin descanso a su corcel, son tantos los amores que en su vida traicionó, que nunca encontrará perdón, en otro corazón. Yipiaié, (yipiaié), yipiaió, (yipiaió). Jinetes por el cielo van y no se detendrán. Pusieron rosas rojas en memoria de su amor, el cielo se ha encendido con un bello resplandor y ya la enamorada lo ha sabido perdonar, borró su culpa la oración, por fin descansará. Yipiaié, (yipiaié), yipiaió, (yipiaió). Jinetes por el cielo van y no se detendrán. Leyenda de un jinete que galopa sin cesar, cumpliendo la condena de cruzar la eternidad, por traicionar en vida lo que fue su gran amor, sembrando llantos y dolor, en otro corazón. Yipiaié, (yipiaié), yipiaió, (yipiaió). Jinetes por el cielo van y no se detendrán. Yipiaié, (yipiaié), yipiaió, (yipiaió). Jinetes por el cielo van y no se detendrán.